
A mi Diosa. Lo nuestro es un amor en dos dimensiones, las marcadas por la superficie plana del monitor de la computadora. Nunca he tenido la oportunidad de estrecharla entre mis brazos, de sentir el aroma de su piel, de saborear la dulce esencia de su boca, pero aun así lo nuestro es auténtico, genuino. He soñado con sus palabras escritas en la fría superficie del teclado. Palabras calientes, sensuales, que me han hecho recorrer en un instante los ocho mil kilómetros que nos separan, cayendo de improviso en su cama. . Noche tras noche, mi amante con la luna […]