Relato erótico: “Apocalipsis 2” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Miró de nuevo, apartándose hacia un extremo. Un nuevo relámpago iluminó toda la colina que bajaba suave por la parte delantera de la casa hasta el bosque profundo. Estaba plagada de caminantes que subían la colina de forma lenta y perdida, como si no les afectase la intensa lluvia. Hizo señas a su Madre para que no hablara. Ella lo miró extrañada, con los ojos graves y la mirada apocalíptica. Se acercó y le dio una escopeta cargada y dos cajas más de munición. Se acercó y le tapó la boca intentando que no chillase. Le susurró al oído. “Hay […]

Relato erótico: “Apocalipsis” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Jaime bebió un sorbo más de la botella de whisky y la dejó sobre la mesa. Convenía no beber demasiado para estar alerta. Se secó los labios humedecidos con el antebrazo desnudo. La primavera avanzaba despacio y los días cálidos iban llegando a mediados del mes de mayo, o tal vez ya estuvieran en junio. Miró a través de las tablas que aseguraban el amplio ventanal del salón, ahora reducido a una estrecha franja de unos diez centímetros por los que mirar y apoyar alguna de las escopetas si se aproximaban caminantes subiendo por esa zona de la colina. Todo […]

Relato erótico: “La decadencia: 2. El nacimiento del dolor” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

El coche miraba al lago. Las luces apagadas, la noche en ciernes, la ciudad bulliciosa e iluminada al fondo. Aun resonando en el eco del manto de estrellas el canto de los cisnes, aun se dibujaba el rastro rosáceo del vuelo de los flamencos al atardecer. La luna me mira pícara extendiendo su luz plateada, mientras Lorena me besa dulce y su mano acaricia mi paquete, muy crecido. Se ajusta las gafas y se recoge el pelo. Se desabrocha la camisa y suelta su sostén. Le agarro las peras y las lamo, noto endurecerse los pezones en mi boca y […]

Relato erótico: “La decadencia: 1. El despertar del Diablo” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

La luz de la luna atravesaba la ventana y se derramaba en su espalda. Se curvaba desde el hermoso trasero hasta su pelo rubio teñido. La columna vertebral interpretaba un hermoso baile en zigzag, mientras mi pene entraba y salía de su mojado y cálido coño. Mis manos, inquietas, acariciaban su trasero, dando azotes; y de ahí recorría sus muslos y caderas. Cada milímetro de su piel se me antojaba de Diosa, cada gemido quedo de mi amante endulzaba mis oídos. El aroma a vainilla de Lorena se entremezclaba con el estándar de la habitación de un hotel de cuatro […]

Relato erótico: “Paki, mi Diosa Madura.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Mi cuñada Paki siempre fue un icono para el que os habla. No se pueden explicar los sentimientos; aunque más que sentimientos, Paki despierta en mí un incontrolable impulso sexual. Más bien puedo contaros cómo es ella, y cómo sucedió. Todo hombre tiene un día que recuerda como el mejor de su vida, y que siempre lleva a gala en su secretismo interno. En mi caso, con solo treinta años de vida, ya puedo decir que tengo el mío. Y no crean que estoy falto de momentos inolvidables, pues no puedo quejarme, pero encontrar la compañía, en cama, de Paki […]

Relato erótico: “Mis yeguas y yo. Explorando a mamá.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

A Sara le dejé correr el carrete, pues aunque su cuerpo era delicioso y su juventud bella y apasionada; no quería abusar de sus dieciocho años. Debía dejarla vivir su vida y pedirle sexo solo alguna vez. Lo cierto es que sus ojos, su pelo, sus pechos tersos y firmes, su culo de Diosa, toda ella; me hacían ir más al gimnasio a mantenerme. Siempre quise amar a las mujeres, siempre quise tener mil yeguas para mí. Manoli, su madre, era la única yegua de la que podría enamorarme. Ella me brindaba sexo cuando quería, al instante, y de una […]

Relato erótico: “Mis yeguas y yo. Con Sara, hasta el cielo.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Sarita estaba deliciosa. Consciente de que era para mí, que ella lo consentía con aparente buen agrado y de que tendríamos unas tres horas de tranquila intimidad, mi felicidad era un hecho irrefutado. El mundo daba vueltas al compás de la más bella música que jamás habrá escuchado el ser humano. La luz rojiza del atardecer de finales de septiembre, daba a su habitación un halo de intimidad serena y atemporal. Además de dejar pasar el color rojizo de la verdad caduciforme, la ventana situada sobre su escritorio dejaba ver un hermoso cuadro de castaños, naranjos y baja arboleda del […]

Relatos eróticos: “Mis yeguas y yo. Apuntando a Sarita” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Pasé un tiempo acariciando a mis dos flamantes yeguas. Manoli me daba buen sexo, con carácter y dedicación. No quedábamos muchas veces y manteníamos con recelo nuestros secretos encuentros. Ella buscaba gustarme, no me era muy difícil darme cuenta de ello. Eso me hacía sentir a gusto y generoso con aquella hembra. Al fin de cuentas, las pocas veces que quedábamos, nos entregábamos con dedicación. Mi madre me daba amor. Esa era la palabra, amor. Cuando acudía a sus brazos me recibía con el alma abierta y me entregaba su dulce y maduro cuerpo. Lo hacía con naturalidad y nunca […]

Relato erótico: “Mis yeguas y yo. Madre no hay más que una.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Lo reconozco, tengo un problema con la bebida. Con la bebida y con Chopin. El alcohol porque me ha hecho follar más que un sí quiero, Chopin porque me relaja antes y después de casi todo. Nos hicimos amantes casuales. La casa de mis padres sirvió de cuartel general; y las prendas de mi madre se acabaron convirtiendo en el testigo tangible de una fantasía que acabó siendo enfermiza. La puerca de Manoli me acabó empujando a un abismo del que no quise saber demasiado en el pasado; y al que solo me asomaba en los sueños secretos de alguna […]

Relato erótico: “Mis yeguas y yo” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Manoli vestía pantalón vaquero, que sin ser ajustado  le dejaba marcado el trasero. Una marca de carne bajo la tela, que en cambio era a fuego bajo mi bragueta. Arriba lucía su escote. Su eterno escote, delicioso fruto de los Dioses; ¡oh!, ¡quien al probarlo sintiera el edén en sus labios!. ¡oh, libre de mí!. Escote con más guerra que bandera a la que defender. Más insinuación que bulto. Más deseo de querer mostrar algo de lo que carecía. No muy pechugona es Manoli, como pueden imaginar mis queridos lectores. No muy pechugona, pero sí guerrillera. Y pongo a Dios […]

Relato erótico: “El pueblo de los placeres 3” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

El funeral fue íntimo. A la vuelta del cementerio Luís iba del brazo de su madre caminando despacio, pues estaba solo a un paseo del pueblo. Detrás iba la tía Ana, la cual mantenía una seriedad atípica y alejada del propio luto. No puedo creer que lo haya hecho, ¿cómo ha podido quitarse la vida? Comentó Luís, ya de mejor ánimo. Los últimos días habían sido agotadores. En todo momento Luís había colaborado con la policía para esclarecer los hechos del hipotético suicidio. Finalmente se concluyó que la anciana no quería ser un estorbo para la familia, debido a su […]

Relato erótico: “El pueblo de los placeres 2” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

El cantar de los pájaros y los primeros rayos de sol despertaron a Luís. Se giró, a su lado dormía su tía. Se levantó con cuidado y la dejó tapada con el abrigado edredón nórdico. Estaba desnuda y el frío crecía por días en ese recién estrenado invierno. Mientras desayunaba conectó su portátil. Consultó la meteorología: mínimas de menos cuatro grados y máximas de diez en toda la sierra de Huelva. Despejado. Apuró el desayuno y se preparó para ir a correr. Al salir topó con una nueva nota sobre la alfombrilla exterior de la entrada a su casa. La […]

Relato erótico: “El pueblo de los placeres 1” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Cuando a sus treinta y cuatro años Luís ganó quince millones de euros en un juego de loterías a nivel europeo, tuvo claro que dejaría su aburrido y mal pagado trabajo de comercial. Nunca se acostumbró a vivir en la gran ciudad. No estaba hecho para los atascos, ni las muchedumbres del metro, ni los codazos en el autobús. No soportaba ser atracado una media de tres veces al año, y sus pulmones no aguantaban más la contaminación de centenares de miles de coches. El pueblo de su madre. Siempre lo tuvo en mente y nunca se planteó volver. Sobre […]

Relato erótico: “El regalo de reyes de mi mujer.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

A mis cuarenta y ocho años supe entender los deseos más profundos de mi mujer. Sus cuarenta y dos están llevados de forma magistral. Es una auténtica morenaza, con el pelo ondulado, ojos negros como tizones. Alta, 175 cm, y alrededor de los setenta quilogramos. Sus pechos no son grandes, tiene una noventa, pero tienen grandes pezones y bastante sensibilidad en ellos. El simple hecho de que alguien se los coma la vuelve loca y provoca un chorreo en el coño que solo puede saciarse con un polvazo. Entro tan a saco porque esta historia lo es. En la nochevieja […]

Relato erótico: “Nochebuena con Isa” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

“Es posible que no deba escribirte esto. Lo mejor sería olvidar lo sucedido. Lo mejor sería no haber hecho caso a tus correos. Tal vez la vida sea más fácil si se olvida. Pero no puedo. No pretendo entrar en cuestiones de mi vida sexual; pero lo cierto es que aquello que nos sucedió en mi casa de campo, hace ya casi dos años, es el más morboso y divertido que he tenido desde entonces. Me propuse olvidarlo cuanto antes. Soy una mujer fiel y quiero a mi marido. Me sentí rastrera de haberle hecho eso a mi hermana. Pero […]

Relato erótico: “Dulce perla joven para Eugenia” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Desde que su sobrina-nieta había salido oficialmente del armario, Eugenia era un alma poseída por fantasías, deseos y ardores. Su soltería era responsable de una juventud mal aprovechada, con las vistas puestas en su exitosa carrera como abogada. Ahora, a sus cincuenta y ocho años, una crisis personal se acercaba como una inevitable tormenta en alta mar. Siempre se preguntó si su falta de apetito sexual fue motivo de su no reconocida orientación sexual. Admiraba la valentía de la nieta de su hermano mayor. Con sus dieciocho años, Sandra no había perdido el tiempo; y tenía toda la vida por […]

Relato erótico: “El pueblo de los placeres 4” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

    “Hola Luís, soy mamá. Esto que voy a contarte es algo que jamás te tendría que haber contado. Pero me veo en la obligación, pues llevo días muy preocupada por ti y mi hermanita. Se trata del pueblo. Estoy convencida que a estas alturas ya te habrás dado cuenta que ocurre algo anormal. También estoy segura que estás acostándote con la tita Ana. Ella se pone muy enferma en ese pueblo. Tenéis que salir de allí cuanto antes. Cuando me comentases que ibas a vivirte allí, tuve que controlar el impulso de explicarte por qué estabas en un […]

Relato erótico: “La casa de campo” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Sonó el teléfono mientras salía del baño con el recién colocado albornoz. Tras descolgar con el clásico “dígame” escuché su voz. Hola, Víctor. ¿Qué tal?. Hola Isa. Muy bien ¿y tú qué tal? Bien pero necesito un favor. Es acerca de lo de mañana. Mi marido trabaja y Ángel no me coge el móvil. El problema es que aun no hemos comprado la comida ni la bebida; y necesito que me acompañes a comprar para luego acercarme al campo. ¿Me recoges a las 18:00?, ¡por favor! Perfecto. No tenía nada que hacer. Hasta las seis. Es probable que haya iniciado […]

Relato erótico: “Trance azul. Acto 3.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Acto 3. Una visita inesperada. Anne era una chica joven, apenas veinte años. Estudiante de psicología y Amante de las ciencias ocultas y el más allá, estudiosa de fenómenos paranormales. Delgada y baja, con gafas que tapaban unos bellos ojos verdes y pelo rubio que siempre llevaba recogido. Era fibrosa, atlética y deportista. También amante de las historias incestuosas, se hacía pasar por el personaje de madre madura amante de su hijo, con el que se había realizado innumerables dedos hasta la fecha. Había ideado un plan de perversión incestuosa basándose en estudios psicológicos, y le había introducido todo lo […]

Relato erótico: “Trance azul. Actos 1 y 2.” (POR CABALLEROCAPAGRIS)

Acto 1. Cálculo complejo. El salón recibía elegante el final de la tarde. Los últimos rayos de sol se colaban formando ángulos obtusos sobre los muebles de madera noble, dejando los jarrones, cuadros y al espejo en sol y sombra. La soledad de la ciudad permitía que solo se colara el canto de las golondrinas al atardecer. Domingo maldito de verano, lejos del mar, sobre las calles peatonales de la pequeña ciudad. Pocas nubes en el cielo, formando una extraña espiral, como una puerta a otro mundo. Apuró el Whisky y notó como una sombra recorría el salón. Tuvo un […]