
Te preguntas por esta racha de éxitos que parece no tener fin y te contaré que todo empezó aquel día hace cinco años gracias a aquel viejo cuervo gritón. Nadie que no haya estado ahí abajo recibiendo una soberana paliza lo entendería. Al final del primer tiempo nos ganaban por tres a cero, no nos habíamos acercado al área contraria ni una sola vez y si no llega a ser por el portero que paro varios goles cantados, hubiese sido la debacle. Cuando entramos en el vestuario cabizbajos y arrastrando los pies el viejo ya estaba allí, de pie, con […]