
El frio me despierta y al hacerlo aunque entre brumas, me doy cuenta de que estoy en una postura muy forzada. Estoy casi doblada por la cintura, mis piernas levantadas y los pies apoyados sobre algo que no tardo mucho en darme cuenta de que son los hombros de alguien, y que ese alguien tiene su verga metida en mi vagina. Me están follando!. Poco a poco me voy dando cuenta de mas cosas, que una gruesa polla no para de entrar y salir de mi vagina, siento algo extraño pero no puedo revolverme, y aunque ahora tenga los ojos […]