
1 De antemano aviso que el principio de esta historia puede llevar a confusión y que quizás penséis encontrar en esta historia la vida de una mujer entregándose al mejor amigo de su marido. Aunque finalmente eso fue lo que ocurrió y no lo niego, la verdad es que tras leer nuestras vivencias disculpareis nuestra actitud y descubriréis que, aun traspasando los límites que marca la moral, lo nuestro es una historia de supervivencia mutua. Para empezar, debo presentarme. Me llamo Juan de Urbieta. Mi nombre quizás no os diga nada o por el contrario os suene por la […]