
Mi cuñada, mi alumna, mi amante (3) – Uffff, ¡qué dura se te ha vuelto a poner!- exclamó mi cuñada apagando el cigarrillo. – Eres tú quien me pone la polla así de dura. ¡Quítate las botas, que te voy a follar como te mereces!. Estaba tan excitado de nuevo, y tenía tantas ganas de darle su merecido, que decidí recuperar mi autoridad y demostrar que, a pesar de su seguridad en sí misma, y de haberme dejado llevar por sus encantos, quien tenía el control era yo. Yo aún seguía siendo 10 años mayor que ella, cuando ella aún […]