
Tras un silencio incomodo intente agregar algo, pero el sonido de unos pasos acercándose nos hizo darnos cuenta del lugar y la situación en que estábamos, mas aun de la forma en que nos veíamos… ¿Qué hacemos?… me pregunto asustada. Por mi mente cruzo cerrar la puerta del baño, pero… ¡Estábamos en el baño para profesoras!, generalmente ellas tenían una llave. El baño también era usado por el personal administrativo, cuyas oficinas estaban cerca. Diablos, ¿Nos habrán escuchado?.. Pues hay que escondernos… dije presuroso indicándole una de las cabinas de los baños. En cualquier otro baño hubiera sido una situación […]