
El tono de Loana era lo suficientemente imperativo como para que yo no persistiera con la duda… Comencé a soltar muy lentamente los botones de la blusa que llevaba. “Más rápido – conminó ella -. No estás haciendo un strip tease, putita” El tatuador festejó el comentario de Loana con una risita. Urgida por las órdenes de ella, desprendí casi de un tirón la blusa sin cuidado de que tal vez pudieran saltarse algunos botones. La premura me había puesto nerviosa; me quité el calzado simplemente pisando un pie con el otro y luego desprendí el botón […]