
———————————— -LIZ: ¿te quieres estar quieto? – se desesperaba al intentar limpiarme la herida del costado. -YO: joder, que escuece…… -ELI: así recordarás que no tienes que meterte en peleas – puso cara de madre mientras me quitaba la bolsa de guisantes congelados del ojo amoratado. -YO: ¿y que debería de haber hecho? -ELI: pues irte, corriendo si hace falta, no te hubieran pillado – tenia razón, era rápido y de gran zancada. -LIZ: ya, y se deja allí a la niña corriendo detrás con los taconazos – se agachaba a soplar en la herida, es increíble como aguanté varios […]